Para la gran mayoría se acabó lo bueno. Atrás quedaron ya las vacaciones, el Sol, la playa, el estar tumbado en la arena y olvidarse de todo, y poco a poco quedará atrás también nuestro bronceado que tanto nos ha costado conseguir.
De todas formas siempre hay trucos y consejos que puedes tener en cuenta para ralentizar la desaparición de nuestro moreno, no te lo matendrá eternamente pero siempre podrás lucir moreno para este otoño sin necesidad de recurrir a los ya comentadas cabinas de rayos UVA.
Lo primero que debes tener en cuenta es que no debes guardar el protector solar hasta el año que viene. Aunque a partir de ahora el Sol apriete un poco menos, los rayos seguirán incidiendo sobre tu piel que deberás proteger a diario.
El siguiente paso será la hidratación, que será un punto clave para mantener nuestro bronceado. La piel se regenera aproximadamente cada 28 días y se estima que en dos meses (con la segunda regeneración) se pierde la mayor parte del moreno.
Si por el efecto del Sol nos hemos pelado o castigado en exceso nuestra piel, esta regeneración será más rápida por lo que el moreno nos durará menos. Si mantenemos la piel muy hidratada la regeneración será más lenta, y podremos mantener el moreno por más tiempo.
Para ello podrás utilizar crema hidratante para el rostro y para el cuerpo leche hidratante, aceite de almendras o incluso un after sun, aunque no hayamos tomado el Sol nos ayudará a mantener el moreno por más tiempo.
Los autobronceadores, de los que también os hemos hablado en Mensencia te darán el toque idóneo para mantener ese tono que tanto te gusta por más tiempo. Ahora que ya tienes la piel bronceada te será más fácil dar con el tono adecuado sin pasarte.
También para los más coquetos os podemos recomendar utilizar polvos de Sol o polvos Terracota que darán un toque de luminosidad y potenciarán vuestro bronceado.Guerlain y Jean Paul Gaultier por ejemplo tiene unos polvos bronceadores especialmente diseñados para hombres.Ya por último recordaros el tema de la alimentación, quizás al apartado que menos importancia se da, pero probablemente sea uno de los más importantes. Para ello contamos con un gran aliado, el betacaroteno.
El betacaroteno es un componente de la vitamina A que una vez que pasa a la sangre se encarga de dar un mayor tono de piel, estimulando la pigmentación además de protegernos de la radiación solar. Los alimentos más ricos en betacarontenos son la zanahoria, la calabaza, el perejil, el melocotón o el brócoli entre otros. Incluso puedes aplicarte cualquier aceite de zanahoria por todo el cuerpo que podrás encontrar en cualquier herboristería.
